Cuando somos jóvenes la mayoría no tenemos claro qué queremos ser de mayores.
Yo lo tenía clarísimo, siempre pensé, quiero ser puta de lujo, quiero trabajar de escort, una chica de compañía de esas que están con hombres, disfrutan y además cobran por ello. Quiero ser prostituta.
He descubierto que me encanta el sexo y me encanta el dinero y tenía claro que quería ganarme la vida con algo que también me encanta, follar y que me follen.
Ahora puedo decirlo, soy una puta, los hombres acuden a mí porque quieren contratar putas, quieren follar con alguien que les da placer y les haga cosas que no les hacen en su casa o que no consiguen fuera con una niña inexperta, los hombres quieren mujeres sustitutas.
Lo digo sin ninguna vergüenza por que me encanta ser puta. Disfruto chupando las pollas de mis hombres, como yo los llamo, recorriendo sus cuerpos excitados y viendo sus caras de placer mientras succiono, suelto, presiono y vuelvo a succionar.
Es una de las cosas que más me gusta hacerles y una de las que más me piden, tragarme su polla hasta que no entra más, mientras les miro a los ojos con mirada picarona ¿te gusta cariño? Les pone a cien, y a mí también. Siempre me dicen hazme una garganta profunda de esas que tanto me gustan.
Hay muchas otras cosas que me gustan, y a ellos, pero eso os lo contaré en otro momento.
Hoy toca hablar de mi profesión como prostituta de lujo.
Porque quiero ayudar a otras mujeres que, como yo cuando era jovencita, quieren trabajar como prostituta, y me preguntaba:
¿que necesito para trabajar de escort?
No voy a mentir, he tenido suerte porque la vida me ha dado un cuerpo de escándalo y una carita angelical con un toque morboso, labios carnosos, ojos expresivos y buenas proporciones.
Y es que tengo un cuerpo que derrite, con un culo redondito que incita a follarse y una cinturita pequeñita que hace que mi culo y mis caderas sean aún más sensuales.
También me cuido, para mí y para mis hombres, porque mi cuerpo es una inversión, y aunque tengo claro que en algún momento va a cambiar, ahora soy veinteañera y lo tengo tan prieto y escultural que a todos vuelve locos. Tengo que aprovecharlo para hacer felices a mis hombres y verles disfrutar.
Hay que aprender mucho para ser escort de lujo
Pero no todo es mi cuerpo y mi cara, para ser una buena puta necesitas aprender mucho sobre sexo y sobre hombres, necesitas ser una diosa del sexo y yo lo soy.
He aprendido cuándo un hombre quiere que sea sensual y erótica, cuándo quiere que sea su compañera de cama y cuando quiere que sea una zorra y le folle como una perra en celo.
También me encanta ser sumisa y dejarme hacer, que el hombre me domine mientras me azota mi culito prieto y me folla sin piedad por detrás, dame más mi amo que me encanta, ummm…
Para ser prostituta tienes que tener muy pocos reparos cuando un hombre te pide algo, aunque si los tienes es respetable y deben acatar que tu no quieres hacer algunas cosas.
Por ejemplo, cuando empecé hace unos meses no quería hacer lluvia dorada ni besos negros.
Pero ahora me he dado cuenta de que los hombres que me lo piden se vuelven locos de placer cuando mi orina empieza a caer calentita sobre sus cuerpos o de cómo disfrutan mientras les recorro la entrada de su ano con mi lengua y me voy abriendo paso poco a poco con ella… ellos disfrutan y yo me voy poniendo a cien.
Es un placer para mí, me excita tanto que algunas veces he conseguido correrme sólo tocándoles a ellos y viendo cómo gimen de placer mientras pienso que, en breve me van a dar su polla, toda para mí, toda dentro de mí y me van a empotrar como si no hubiera mañana.
Lo tengo claro, mi vocación es ser prostituta de lujo ¿ahora qué?
Mi mejor recomendación para ti, jovencita que quiere ser puta, es que disfrutes de lo que haces, que la vida es corta y cuando una puta disfruta follandose a sus hombres, se nota.
No hay nada peor que una puta que se comporta como un palo, que no se mueve al ritmo de las embestidas, y que no gime de placer mientras le comen el coño y pide más.
Pequeños consejos para ser prostituta de lujo
Si ya lo tienes claro y te has decidido trabajar de escort, quiero darte unos pequeños consejos para ser la mejor escort de lujo, consejos que a mi nadie me dio cuando empezaba y que he ido aprendiendo a medida que mis hombres me follaban.
Espero que te sirvan, son los que yo pongo en práctica y sigo al pie de la letra en mi vida como puta:
- Apúntate a la mejor web de escorts de internet, tus hombres no tardarán en llegar y si eres buena y sigues mis consejos cada vez tendrás más y repetirán una y otra vez.
- Redacta un buen anuncio y prepara unas buenas fotos, déjales claro que les darás lo que buscan
- Disfruta con lo que haces, si chupas pollas, chúpalas con pasión, si cabalgas a un hombre muévete como si estuvieras encima de una mula, deja que te penetre por todas partes. Gózalo y harás que se vuelvan locos
- Aprende, lee y practica todas las posturas, todas las formas de lamer, de chupar. Practica mucho para hacer las mejores mamadas del mundo. Ensaya una y mil veces cómo te mueves y bailas para el
- Busca dentro de cada hombre y descubre qué necesita, quiérele como nadie le ha querido, fóllale como nadie le ha follado y conviértete en la sustituta de su vida
- Quiérete y respétate, si no te respetas difícilmente tus hombres te respetarán. Valora tu trabajo como escort y serás valorada.
Ahora sólo te queda ponerte en marcha, contacta con Emasex, rellena su formulario de alta para chicas de compañía, ofrece tus servicios de prostituta y comienza a disfrutar de una nueva vida en el mundo del sexo, el mundo que te gusta.